martes, 10 de marzo de 2009

texto medieval

Cuento consejero

Una vez había un hombre que era muy pobre y estaba tan desesperado que tenía más de un trabajo y casi no dormía. Un día, se decidió a jugar a la lotería, con tan buena suerte, que le tocó el premio gordo, pero se sintió mal, porque él sabía que tanto dinero no se lo terminaría nunca. Así que recordó todo lo que él tenía que hacer para poder sobrevivir, de modo que pensó en muchos modos para ayudar a sus antiguos semejantes. Pero no se le ocurría nada, así que pidió ayuda a un viejo sabio. El cual siempre había estado a su lado dándole consejo, y el anciano le dijo que podía proporcionar viviendas y ayudas a otra gente menos afortunada, de modo que ya con su idea se dispuso a ayudar a sus antiguos compañeros invirtiendo tanto dinero que en vez de ser un hombre rico, acabó siendo un hombre normal, pero muy feliz y con orgullo de serlo. También, en todas las viviendas que hizo, le hicieron un homenaje para recordarlo, y gracias a eso, a los medios de comunicación y a las entrevistas, por su gran gesta por los menos afortunados económicamente, volvió a ganar dinero, con lo cual todo acabó bien. No es que fuera muy rico, pero podía vivir bien y también a todos los pobres de su ciudad, esto también nos enseña que toda buena acción tiene su recompensa, y que el dinero no da la felicidad.

No hay comentarios: